La «ciudad de proximidad» es uno de los conceptos que se lleva trabajando más ampliamente en los últimos años para mejorar la sostenibilidad de las ciudades en las que vivimos. La ciudad de proximidad no sólo busca que las personas puedan pasear cómodamente por las calles o que haya suficiente variedad y cantidad de usos, sino que esto lo combina con que se encuentren cerca de casa.
Esto permite que las personas prioricen el desplazamiento a pie o en bicicleta al tener sus actividades diarias en el barrio, y lleva a ofrecer calles más activas y atractivas. Esto aumenta la actividad física, mejorando la salud de las personas. Además, permite que las personas dediquen menos tiempo a desplazarse y más al ocio o al cuidado propio o de sus familias. A nivel medioambiental, los niveles de ruido y contaminación se reducen junto con una menor presencia de coches.
Un objetivo prioritario e implícito en estos modelos es cambiar el paradigma de desplazamiento de la ciudad actual (“ciudad dependiente del coche”), donde la prioridad es el vehículo privado, transformándolo en un modelo centrado en la movilidad peatonal.
Uno de los modelos más extendidos de la ciudad de proximidad es la Ciudad de los 15 minutos. La Ciudad de los 15 minutos de París es un ejemplo particular de aplicación de las aportaciones teóricas sobre la ciudad de proximidad. Carlos Moreno comienza a trabajar en la teoría de la ciudad de los 15 minutos en 2016 con el fin de transformar ese modelo, ofreciendo un esquema de ciudad donde se integran todos los servicios a una corta distancia del domicilio. Este modelo cobró especial relevancia y peso en como política urbanística exitosa de la movilidad con la irrupción de la pandemia, momento en el que se puso en evidencia algunas de las grandes contradicciones del modelo urbano actual, y en el que el modelo de Moreno sirvió de acelerador para que su propia ciudad y otras se pusieran en marcha.
La Ciudad de los 15 minutos de Paris ha sentado los pilares básicos de la teoría de la ciudad de proximidad que se utiliza en la actualidad:
- Densidad: Tiene que haber suficiente gente y suficientes usos para que la ciudad sea interesante.
- Proximidad: Tanto de distancia como de tiempo. Es decir, que se localicen a poca distancia de la vivienda, pero que además la infraestructura de la ciudad permita llegar a él en poco tiempo.
- Usos mixtos: Con suficiente variedad de usos, evitando la generación de barrios especializados o zonas con usos únicos, como los polígonos industriales.
- Ubicuidad y digitalización: Todas las personas tienen que tener la opción de acceder a todos los servicios diarios, ya sea de manera presencial u online en caso de que sean servicios especializados. Por tanto, es importante crear una red suficiente de conexión a internet para poder acceder a los servicios online.